Por Alejandra Sicoli. Somellier-Certificación Escuela Argentina de Sommeliers. CETT
El maridaje de vinos y quesos es una combinación que deleita los paladares desde hace siglos. Esta práctica, que se ha convertido en una verdadera ciencia gastronómica, busca realzar los sabores y texturas tanto del vino como del queso para crear una experiencia sensorial única.
• La Filosofía del Maridaje
El objetivo del maridaje es encontrar la armonía entre el vino y el queso. Un buen maridaje puede resaltar las notas frutales y florales de un vino o subrayar la cremosidad y el carácter de un queso.
No existe una regla rígida, pero hay algunas pautas que pueden guiar esta deliciosa aventura:
-Afinidad de Sabores: los vinos y quesos que comparten características similares tienden a complementarse bien. Por ejemplo, un queso suave y cremoso puede maridar perfectamente con un vino blanco ligero y fresco.
-Contraste: en ocasiones, los contrastes pueden ser sorprendentes. Un queso azul con un vino dulce de postre, como un Sauternes, crea un equilibrio maravilloso entre lo salado y lo dulce.
-Terruño: los productos de la misma región a menudo se complementan de manera natural. Un queso manchego con un tinto español puede ser una combinación ganadora.
• Combinaciones Clásicas
Algunos maridajes de vinos y quesos han alcanzado un estatus icónico. Aquí hay algunas combinaciones que nunca fallan:
-Queso Manchego y Tempranillo: el queso Manchego, es firme y ligeramente salado. Un Tempranillo joven, con sus notas de frutos rojos y taninos suaves, complementa maravillosamente los sabores del Manchego
-Brie y Chardonnay: la cremosidad del Brie se realza con la acidez y notas cítricas de un Chardonnay.
-Queso de cabra y Sauvignon Blanc: el queso de cabra, con su acidez y frescura, encuentra su pareja perfecta en un Sauvignon Blanc. Este vino blanco, consus notas herbales y cítricas, realza los sabores del queso de cabra y ofrece una experiencia refrescante.
• Explora estas combinaciones
Parte del encanto del maridaje de vinos y quesos es la oportunidad de experimentar. No tengas miedo de probar combinaciones inusuales. Aquí hay algunas ideas para comenzar:
-Queso Parmigiano-Reggiano y Chianti: en Italia, el Parmigiano-Reggiano se combina con frecuencia con un Chianti. La acidez y los taninos del Chianti equilibran la salinidad y la textura granulada del Parmigiano, creando una armonía deliciosa.
-Queso Roquefort y Sauternes: en Francia, el Roquefort, un queso azul fuerte y salado, se marida tradicionalmente con un Sauternes. Este vino de postre, con sus notas de miel y frutas maduras,
equilibra la intensidad del Roquefort y ofrece una experiencia sublime.
• Consejos para un Maridaje Perfecto
-Temperatura: asegúrate de servir los vinos y los quesos a la temperatura adecuada para resaltar sus sabores.
-Orden de Cata: comienza con los quesos más suaves y vinos más ligeros, y avanza hacia los sabores más intensos.
-Disfruta el Proceso: el maridaje es una experiencia personal.
Maridar vinos y quesos es un arte accesible para todos. Con un poco de curiosidad y audacia puede encontrar combinaciones deliciosas que elevan tanto el vino como el queso a nuevas alturas de placer gustativo.
¡Salud!